Se dice que la esperanza es lo último que se pierde, porque nos mantiene vivos y con fe, sobre un futuro mejor. La Estrella es aquello que nos ayuda a aferrarnos a la vida con la confianza de que aunque todo se encuentre derrumbado (La Torre), se nos permite reconstruirnos para volver a empezar. En este viaje del Loco, en "Tarot desde mi cristal", se nos autoriza soñar, manteniendo las ilusiones intactas, dejándonos fluir en el camino.
La Estrella tiene una energía muy positiva, ya que habla de una pequeña luz que nos guía, instintivamente, hacia un deseable futuro. No importa lo frágil que parezca esa luz, nos da la confianza necesaria de que pronto todo estará mejor. La esperanza es indescifrable, porque aunque nos veamos sumidos en la tragedia, pareciera que pudiera extenderse iluminando todo lo que se puede percibir como oscuro.
Por lo anterior, las situaciones empiezan a fluir con naturalidad, nada es forzado, y las cosas se dan, casi que como por arte de magia. Hay armonía en el ambiente, con posibilidades de un mañana feliz. En nosotros empieza a manifestarse un sentimiento de bienestar personal y la confianza en que todo estará bien.
A nivel particular, nos regala creatividad, belleza, buena suerte, comunicación asertiva y claridad en las ideas y proyectos; es un momento para creer en nosotros mismos, en lo que soñamos y pretendemos lograr, aunque no sea tan claro cómo lo vamos a hacer.
Al ser una carta de naturaleza femenina, su mayor atributo es la intuición que nos acompaña en las nuevas decisiones que debemos tomar, después de un momento difícil. Representa la importancia de concentrarnos en nosotros mismos, para que logremos brillar con luz propia, confiando en la inteligencia personal, el carisma, y la facilidad que se tiene al expresar lo que se necesita. Todo es posible si somos leales a nuestra alma.
Con la ayuda de La Estrella es probable sortear las dificultades, porque nada es tan difícil como parece, si respondemos de la mejor manera frente a cualquier adversidad. La mayoría de veces se trata más sobre la actitud ante las dificultades, y la forma en la que las llevamos, que sobre los problemas en sí.
Representa también a una mujer joven muy femenina, que brilla con luz propia, de buena voluntad, que se encuentra en un gran momento, ya que está conectada tanto a su parte mental como a sus sentimientos. Es muy creativa y goza de muy buena inspiración, por lo que está atenta a todo lo que sucede a su alrededor. Quizás es muy segura de sí, por lo que tiende a caer bien, gozando de gran carisma y de buena suerte. Y es probable que consiga lo que desea con facilidad.
En definitiva, La Estrella nos llena de esperanza y de fe. En los momentos difíciles puede ser útil al lograr cambiar de una etapa complicada, a algo nuevo; nos ayuda a recargar la energía, y así emprender un proyecto diferente, al dejar fluir lo que se encuentra estancado, purificando y limpiando lo necesario.
Aunque es importante creer en que todo es posible, y que las cosas pueden mejorar, con esta carta debemos cuidar las falsas expectativas. Podemos pasarnos de soñadores y no lograr ver las situaciones con una perspectiva realista, por lo que hay una tendencia muy fuerte a caer en autoengaños. Con La Estrella hay que soñar, procurando tener los pies en la tierra.
Este arcano representa la promesa de una experiencia de vida mucho mejor, después de ver derrumbado lo que era innecesario. Es por eso que El Loco, aunque acaba de perderlo todo, se mantiene atento a la luz que alumbra sus tinieblas, para ir disipando la oscuridad en la que se encuentra.
Imperitura.
Foto de ClintDyGuaso en Pexels
Algunos derechos reservados.
Comments