Alejada de todo lo mundano se encuentra La Sacerdotisa, el tercer post de “Tarot desde mi cristal”. Esta es una carta llena de misticismo y misterio que es difícil de obviar, ya que La Sacerdotisa protege los secretos del mundo interno y externo, al tener el dominio de la parte espiritual a través de la intuición, del conocimiento interior y del desarrollo de la sabiduría iniciática y esotérica.
Es el vínculo con el subconsciente, lleno de riquezas ocultas al que no se puede acceder sin esfuerzo, al ser el que contiene todas las potencialidades que podemos desarrollar, aunque aun sean desconocidas para nosotros. En pocas palabras, La Sacerdotisa conoce el secreto del destino individual, pero solo es posible acceder a él, revisando las partes más primitivas y sombrías de la personalidad.
La Sacerdotisa también llamada La Papisa, es una mujer sabia, espiritual, sensata y prudente. Ella hace de la voz de la experiencia, indicando que es correcto confiar en todo lo aprendido desde la experimentación (El Loco), la búsqueda de nuestras propias habilidades (El Mago) y el conocimiento sobre cada uno; además de lo que nos aconseja la intuición, prestando atención en las sincronías de la vida y lo que nos indica el mundo nocturno de los sueños.
Enfrentando los miedos y temores, La Sacerdotisa es un arcano que nos regala la posibilidad de cumplir lo que queremos, buscando todo lo que podemos potenciar en nosotros, abriéndonos a cruzar las puertas de lo desconocido. Es aquello que está en el interior de cada uno, pero que nadie más conoce; solo el dueño sabe del poder interno que tiene y este se encuentra lejos de lo superficial porque únicamente se logra desarrollar desde nuestro conocimiento espiritual.
Representa el buen juicio gracias a una gran intuición, en donde muchas veces el instinto debe gobernar a la razón, confiando en la sabiduría del corazón. Es esa sensación sobrenatural de que todo se va dando de acuerdo a nuestros deseos, sin saber el cómo y el cuándo, pero con la confianza plena de que estamos llegando al destino y descubriendo el propósito secreto y real de cada existencia. Por esta razón, La Sacerdotisa es la introspección para llegar al autoconocimiento del mundo interior y personal.
Con un estado de madurez profundo, esta carta muestra una gran capacidad para influir en los demás, con el consejo adecuado en el momento indicado. También habla de una mujer poseedora de gran magia que viene desde su interior, gracias a la unión del conocimiento esotérico con la intuición, aunque muchas veces no transmita todo su saber. Después de encontrar a los verdaderos merecedores de su conocimiento, ella decide a quién compartirlo. Con discreción, inteligencia, sabiduría y prudencia, representa la búsqueda del sentido común y el equilibrio en cada situación, pudiendo llegar a lo que conviene.
Refuerza la memoria interior y conciencia para hallar las soluciones a momentos adversos, problemas o segundas intenciones que pueda haber, y así poder encontrar un conocimiento firme y tranquilo sobre nosotros.
La Sacerdotisa, una mujer que a veces busca la soledad, para conectar consigo misma en su aparente frialdad, es una sabia que comparte su conocimiento con los que lo merecen y con quienes se atreven a vencer sus miedos, para encontrar su propia verdad. Y cuando ella aparece, es porque simplemente debemos confiar en nosotros, en lo que hemos aprendido y en nuestro propio camino.
Imperitura.
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